Con este calor y pasando buena parte del día al aire libre, en la piscina o en la playa, es importante proteger a los niños del sol. En este artículo vamos a daros algunos consejos para proteger a los niños del sol en verano.
Preparando la piel de los niños para el sol
Con los niños conviene extremar las precauciones porque su piel es mucho más sensible que la de un adulto. Se recomienda que antes de los 3 años se evite la exposición al sol. A esas edades, deberán utilizar cremas protectoras de más de 25 SPF e ir vestidos con ropa holgada, gorra o sombrero y gafas de sol.
Hay muchas otras cosas que también pueden ayudarnos a proteger a nuestros hijos de los efectos dañinos del exceso de sol. Si preparamos su piel para exposición solar, el daño será mucho menor. Para ello es importante mantenerla muy hidratada usando aceites naturales después del baño y haciendo que beban abundante agua en estos días tan calurosos. Hay alimentos que son ricos en betacaroteno, que previene los procesos degenerativos de la piel, como zanahorias, albaricoques, calabazas, mangos, melones, etc.
Recomendaciones generales
Para resumir, antes de tomar el sol es importante que tomemos ciertas precauciones:
- Aplicar una crema protectora de factor 20 o superior de 20 a 30 minutos antes de la exposición solar. Lo mejor es aplicarlo en casa, antes de salir, y volver a ponerles la crema después de cada baño.
- Es importante aplicar la crema de manera generosa. Si utilizas la mitad de la cantidad recomendada de una crema de factor 50, obtendrás sólo una protección de SPF 7.
- Protege a los niños del sol del sol con ropa, sombreros y gafas de sol para reducir la cantidad de piel expuesta.
- No es nunca recomendable estar al sol entre las 12 y las 16 horas, porque son las horas de mayor insolación.